Antifrágil es una característica de personas que se manejan bien en los cambios, la volatilidad, el caos o el azar.
Nassim Taleb (famoso economista), acuñó este término tras un exhaustivo estudio de fenómenos inauditos o “cisnes negros”, sucesos impredecibles y de gran impacto.
Vivimos en una era imprevisible en lo social, político y económico. El Brexit es sólo uno de los múltiples ejemplos recientes. Lo que parece imposible sucede cada vez más a menudo. Para afrontarlo necesitamos añadir nuevas fortalezas profesionales y ganar competitividad empresarial y empleabilidad laboral.
¿Cómo podemos pasar de ser frágiles a antifrágiles?
Necesitamos habilidades “emergentes”: gestión de la incertidumbre, polivalencia, flexibilidad, agilidad de aprendizaje y navegar con naturalidad en la disrupción. Fluir en este mundo digital “caórdico”, mezcla de caos y orden.
Nadie es ajeno a los “cisnes negros”. Activar un plan de mejora personal para afrontar esta “nueva normalidad” será un gran reto del talento de los próximos años.
Es preciso también un “liderazgo antifrágil”: gestionar no sólo con datos y certezas sino con intuición y vulnerabilidad. Escuchar y facilitar más. Hablar y dirigir de arriba-abajo algo menos. Diseñar un plan estratégico de personas que potencie el plan de negocio.
Líderes con perspectiva que iluminen la “caja negra” del futuro y creen una visión común ilusionante donde cada colaborador crezca y tenga una contribución positiva.
El reto empieza ahora. Transformarnos; aumentar nuestro autoconocimiento; abrirnos más al exterior; anticipar tendencias y necesidades e innovar para darles respuesta. Una renovada forma de vivir y trabajar para los que abrazan el futuro con un optimismo realista, sin falsas expectativas y esfuerzo diario.
En un mundo plagado de riesgos evidentes y latentes focalicemos en la ilusión versus el miedo como palanca de motivación y aprendizaje exponencial. Así seremos antifrágiles cuando llegue la próxima avalancha de incertidumbres.
Muchos “héroes cotidianos” ya nos demuestran a diario que están preparados con su actitud que marca la diferencia. Apostemos por la antifragilidad en esta época de luces y sombras y disfrutemos la travesía.
Artículo publicado en Expansión (prensa escrita) el 11 de noviembre de 2019
David Reyero Trapiello – Senior HR Business Partner – Sanofi Iberia
e-mail: David.reyero@sanofi.com / Twitter: @davidreyero73 / Linkedin: linkedin.com/in/davidreyerotrapiello/
Orlando Zarza dice
Excelente análisis … propio para los momentos que vivimos…!!!